Más de 300 corredores se calzan las zapatillas a favor de Unicef

El pasado 18 de mayo, la comunidad educativos de la Cooperativa de Enseñanza Vega Media de Alguazas, asociada a Ucoerm, celebró su IV Carrera Solidaria, colaborando en el proyecto Gotas para Níger, que lleva a cabo Unicef.

 

En el evento participaron más de 300 personas, entre las que se encontraban padres, abuelos, profesores y alumnos del centro desde primer curso de Educación Infantil hasta Ciclos Formativos, «despertando la pasión por el deporte y la solidaridad hacia quien más lo necesita», aseguran desde el centro.

 

En esta ocasión, los más de 1.000 euros recaudados se destinaron a la ONG Unicef, dentro del programa 'Gotas para Níger', que pretende la movilización de alumnos y profesores a través de estas pruebas solidarias, ayudando en la protección de los derechos de la infancia en el país africano.

 

Como explica la organización de ayuda internacional, «la campaña 'Gotas para Níger' se inició en el curso 2008-2009 y, desde entonces, estudiantes de todas las edades han podido conocer un poco más acerca del derecho al agua y el derecho a la educación, aportando su granito de arena para apoyar el trabajo de Unicef en este país africano».

 

La responsable de organización de la IV Carrera del CES Vega Media remarca que «actualmente sólo el 15% de las escuelas rurales de Níger tienen agua potable y las dificultades de acceso afectan negativamente a la salud, la nutrición y las posibilidades de desarrollo de 3 millones de niños y niñas en edad escolar».

 

Por ello, «llevando agua a las escuelas de Níger se lograrían dos objetivos: proteger la salud de los estudiantes e incrementar las tasas de matriculación y permanencia en la escuela. Por esta razón consideramos que la pequeña aportación del CES Vega Media resulta crucial y con este mismo objetivo hemos instalado también un mercadillo solidario repleto de productos donados por las empresas de la zona».

 

La Cooperativa de Enseñanza CES Vega Media rescata de este modo «el valor de las diferencias, se construye sobre la diversidad y se proyecta en el futuro formando a jóvenes comprometidos y conscientes de las necesidades  del mundo que les rodea».

 

«Son estas iniciativas las que nos obligan a parar y reflexionar a cerca de la obligación moral que las instituciones educativas de países desarrollados tienen respecto a la mejora de la calidad de vida de todos los niños del mundo, y no hay mejor oportunidad para hacerlo que ahora», concluye la encargada de eventos del centro.

 

La solidaridad es uno de los valores principales que defiende el modelo cooperativo, preocupado por el componente social y la mejora del entorno, y fomentando entre los más pequeños el espíritu de compromiso con el desarrollo de la comunidad.